MARCHA DE UNIÓN DE CONVENTOS CARMELITAS – DAIMIEL – MALAGÓN.

Organizada por el grupo de amigos del “Camino de Guadalupe” y con la colaboración del Ayuntamiento de Malagón se realizó este pasado sábado, 07 de marzo, la primera de las tres Marchas Teresianas de Senderismo programadas por el V Centenario de Santa Teresa de Jesús.

Cuarenta y cuatro fueron los peregrinos que tomaron parte en ella y tres coches de apoyo, que a primeras horas de la mañana se desplazaban al vecino pueblo de Daimiel para iniciar la citada marcha desde el Convento de las Madres Carmelitas de “Nuestra Señora de la Paz” hasta el de San José de Malagón, cosa que harían sobre las ocho.

Extraordinaria recepción de la totalidad de las religiosas de la Congregación de las Carmelitas daimieleñas al grupo malagonero, al que esperaban en la iglesia del mismo Monasterio. Después de unas primeras palabras de salutación y bienvenida se pasó a la realización de la oración conjunta por una feliz travesía y al cántico espiritual, por su parte, de la poesía mística de Santa Teresa “Nada te turbe”, interpretado maravillosamente.

Con el beso de los peregrinos a la reliquia de la Santa que en el Convento custodian las religiosas y la entrega, por parte de estos, de un par de saquitos de habichuelas “Pinesas” y tres libros de la historia de Malagón, de nuestro paisano Feliciano Díaz-Toledo Camargo, con los que, principalmente las dos religiosas de nuestro pueblo que profesan en ese Monasterio (Madre Superiora, Isabel de la Trinidad –Juana Martín Camargo– y Madre Teresa de Jesús –Teresa Aguilera Mera–) puedan recordar sus años vividos en Malagón y otras de nuestras cosas, finalizaba la estancia del grupo en el interior del recinto religioso.

Comenzaba en esos momentos esta primera y significativa Marcha Teresiana por los caminos por donde también anduvo nuestra Santa hasta llegar a Malagón, después de recorrer una distancia de 25 kilómetros que se desarrollarían sin problema alguno y con la satisfacción en todos los participantes de haberla podido llevar a cabo, además de la ilusión y el deseo de poder realizar las otras dos más previstas (desde Toledo y Ciudad Real).

Los peregrinos, de ambos sesos y todas las edades, algunos venidos de fuera exclusivamente para este acto teresiano, llegarían a la plaza del Convento de Malagón ya cerca de las dos de la tarde, pasando a la iglesia de San José a dar gracias a la Santa por haberlos guiados y poder terminar esta marcha de forma satisfactoria y sin incidencias físicas algunas.

Durante el recorrido se ponía la fecha a la correspondiente tercera Marcha Teresiana desde Ciudad Real, que definitivamente se llevaría a cabo el sábado 11 de abril, una vez pasada la de Toledo.      

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